Aún no logramos entender porqué a nuestros hijos no les gusta el tomate, o al menos eso dicen porque se lo comen en las salsas de la pizza y la pasta sin problema. Esta es una de las formas en que sí se lo comen. Es natural, deliciosa, muy fácil de hacer y se puede congelar para tenerla lista en cualquier momento.
Porciones: 4 – 6
Dificultad baja
Tiempo de preparación: 5 minutos
Tiempo de cocción: 30 minutos
Receta adaptada del libro «The Italian Cooking Encyclopedia»
Ingredientes
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 2 cucharadas de mantequilla
- 1 cebolla mediana finamente picada
- 2 libras de tomates cortados en cubos grandes
- 1 diente de ajo cortado grueso
- 3 tazas de caldo de pollo
- 1/2 taza de vino blanco seco
- 4 cucharadas de pasta de tomate
- 2 cucharadas de albahaca fresca cortada
- Sal y pimienta
Instrucciones
- Caliente el aceite y la mantequilla en una olla y añada la cebolla revolviendola hasta que esté transparente
- Agregue los tomates cortados y el ajo, después añada el caldo de pollo, sal y pimienta y la pasta de tomate.
- Cocine en fuego alto y cuando hierva bájelo a medio. Deje cocinar por 20 minutos, revolviendo ocasionalmente para evitar que los tomates se peguen a la olla.
- Licue la sopa con la albahaca cortada y después pásela a través de un colador.
- Sírvala caliente o como variante fría dejándola en la nevera por 4 horas.